Supongo que todos habréis oído hablar de la Romería del Rocío, que se celebra en Ayamonte, en Huelva, todas las primaveras desde hace cientos de años…
En las marismas del Coto de Doñana, se ha construído una ermita de la Virgen del Rocío, a unos kilómetros del pueblo de Ayamonte, y a ella concurren todas las primaveras, personas llegadas desde todos los lugares de España y del resto de Europa, para sacar a la Virgen en procesión un día determinado. Los medios de transporte, son los que tiene cada uno, y muchos van en los carros de labranza, engalanados para la ocasión, o a caballo, quien lo tiene, o sencillamente a pie, pero como no hay carretera, se viaja por caminos polvorientos, vadeando arroyos y se duerme en los mismos carros o tumbados en el suelo, al aire libre, salvo unos cuantos privilegiados que han construído casas cerca de la ermita para ellos y sus invitados, pero en realidad no hay pueblo allí, ni hoteles ni nada que tenga vida, fuera de los días de celebración…
La tradición hace que, tengan que sacar a la Virgen, sólo los mozos del pueblo cercano, saltando una reja y luego salen a una plaza en que suele reunirse hasta un millón de personas que, intentan tocar las andas de la Virgen o arrimar a sus hijos pequeños para que la toquen…
Todo muy folklórico, muy tradicional y con mucha fe… pero yo, digo con la frases colombianas: “Al que le gusta, le sabe”… y: : “Me pido pa no”…
Los nazis, tenían una frase un poco más contundente: “Todo para el pueblo... Nada con el pueblo”…
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